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Durante este pleno se aprobó una propuesta presentada y trabajada desde el equipo de gobierno socialista junto con el concejal de Se Puede Villarrobledo, consistente en una bonificación de la ordenanza fiscal que afecta a vehículos menos contaminantes, aplicándose una bonificación a los vehículos eléctricos de un 75%, y para los vehículos híbridos de hasta un 60%.

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Para Trinidad Moyano, el objetivo planteado en esta propuesta era bonificar a los vehículos menos contaminantes, y que por tanto contribuyen a una menor emisión de CO2, ofreciendo de este modo un aliciente a aquellas personas que puedan estar pensando en adquirir este tipo de vehículos, que poco a poco van introduciéndose en el mercado.

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En el último pleno se aprobó igualmente una modificación de la ordenanza de la denominada “Zona azul”, por lo que los vehículos eléctricos obtendrán una bonificación del 100% en el uso de la misma.

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A juicio de la portavoz del equipo de gobierno, son dos medidas importantes, que vienen a complementar la política fiscal seguida por el actual equipo de gobierno, “que es la de no subir tasas e impuestos, tal y como se ha hecho con el IBI, no subiéndolo en estos años, igual que no se han subidos tasas de ningún servicio público, ya que por el contrario, las hemos rebajado, como ha sido la de las guarderías, en un 20%, y se ha eliminado la tasa que había por la realización de matrimonios en el Ayuntamiento”.

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Moyano ha querido destacar el entendimiento que ha existido en este tema entre el equipo de gobierno y SPV, agradeciendo también el apoyo recibido desde el PP y el concejal no adscrito, que votaron a favor, absteniéndose el concejal de IU.

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La portavoz dio cuenta también del punto por el que se aprobaron las cuentas del Ayuntamiento de Villarrobledo en 2016, indicando que han sido buenas y que es algo que redunda en la política que quería llevar a cabo el grupo Socialista.

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Destaco de las mismas que suponen una reducción de la deuda municipal en 10’5 millones de euros en lo que se lleva de la presente legislatura. A esto se suma la reducción de la deuda que el Ayuntamiento de Villarrobledo mantiene con otras administraciones públicas, abonando letras pendientes de la anterior legislatura, como ha sido el caso de la abonada por importe de 1’8 millones de euros, correspondiente a un adelanto que el PP pidió sobre ingresos del Estado.

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Trinidad Moyano recordó que durante la presente legislatura, el equipo de gobierno está teniendo que pagar pufos dejados por el PP al frente del consistorio, refiriéndose así a los 1’6 millones de euros correspondientes al pago de despidos y salarios de tramitación, “debido a la magnífica gestión económica y de personal que hizo el PP, al despedir a 69 trabajadores, 23 de los cuales resultaron 22 improcedentes o nulos y los tuvimos que readmitir, pagándoles todo ese tiempo que estuvieron despedidos como si hubiesen estado trabajando, dejando los ciudadanos de percibir servicios durante ese tiempo”.

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Se refirió también Moyano a los 840.000 euros que ha habido que abonar por sanciones recibidas por excesos de carga contaminante, debido a que durante la legislatura anterior, “el PP dejó de controlar los vertidos de las empresas contaminantes, y dejaron de funcionar los medidores, lo que provocó que, al no controlar la contaminación, el Ayuntamiento de Villarrobledo sufriese sanciones que ahora hemos tenido que pagar, sin olvidarnos de lo que se dejó de recaudar con estos medidores”.

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Abundó en que, durante la legislatura anterior, el PP llevó a cabo tres obras, como fueron la campa de camiones, el parador de Santa María, y el arreglo de la Avenida Picasent, pero olvidaron pagar las mimas, “y ha sido este gobierno socialista, en minoría, bajo un Plan de Ajuste, readmitiendo a los trabajadores despedidos, quien ha pagado estas obras, y esta es una realidad que se le olvida al PP poner sobre la mesa”.

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Trinidad Moyano apuntó que el PP siempre saca a colación el pago a proveedores, remarcando que siempre se les olvida decir que desde el equipo de gobierno socialista se presentó al resto de grupos un Plan de Pago a proveedores, por importe de 2’4 millones de euros, que hubiese permitido a los mismos cobrar en tiempo y forma, “pero desde el PP, con Valentín Bueno a la cabeza, votaron en contra del mismo, algo que deberían explicar a esos proveedores, porque nosotros tenemos los concejales que tenemos, y solos no podíamos sacarlo adelante”.

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Incidió en las diferente politicas llevadas a cabo por PP y PSOE al frente del consistorio, remarcando que si en la anterior el PP se dedicó a despedir trabajadores y a adelgazar los distintos servicios municipales, lo que redundó en prejuicio de todos los ciudadnos, en la presente legislatura, y pese a gobernar en minoría, el PSOE está volviendo a abrir serviciso públicos, sin subir los impuestos a los ciudadnos y bajando aquellos que son posible, readmitiendo a trabajadores y pagando deudas dejadas por el PP, “porque nuestra prioridad no es tener asesores personales, sino no dejar tiradas a las personas”.

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Por último invitó a los concejales de IU y SPV a sentarse con el equipo de gobierno a dialogar para elaborar los presupuestos municipales para 2019, con el objetivo de dejar atrás la política destructiva del PP de la pasada legislatura.